Solución para las «orejas de soplillo»
La otoplastia es una cirugía que puede corregir estos problemas, y se puede realizar en pacientes a partir de los cinco o seis años de edad, cuando las orejas han terminado de desarrollarse. En este post te contamos todo lo que necesitas saber sobre este procedimiento:
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La apariencia de nuestras orejas puede tener un gran impacto en nuestra imagen y autoestima. Tanto adultos como niños pueden tener problemas estéticos debido a la posición, forma o tamaño de sus orejas, lo que a menudo lleva a intentar ocultarlas bajo el cabello.
¿Qué es la Otoplastia y en qué consiste?
La otoplastia es un procedimiento quirúrgico que se realiza para corregir la apariencia de las orejas, ya sea reduciendo su tamaño, mejorando su forma o colocándolas en una posición más natural.
La otoplastia es un procedimiento seguro y efectivo que se realiza bajo anestesia local o general, según las necesidades del paciente. Durante la cirugía, se realiza una pequeña incisión detrás de la oreja para acceder al cartílago y realizar las modificaciones necesarias. Luego, la piel se sutura cuidadosamente para minimizar cualquier cicatriz visible.
¿Cómo es el posoperatorio de otoplastia?
El posoperatorio de la otoplastia, puede variar de paciente a paciente, pero en general, es un proceso de recuperación relativamente sencillo y con pocas complicaciones. Después de la cirugía, el paciente puede sentir dolor, inflamación y molestias en la zona tratada, que pueden ser controlados con medicamentos recetados.
Es importante que el paciente siga cuidadosamente las instrucciones postoperatorias proporcionadas por el cirujano, como mantener la zona tratada limpia y seca, aplicar compresas frías para reducir la inflamación y evitar actividades que puedan poner presión en las orejas durante varias semanas.
El paciente también debe evitar dormir de lado durante las primeras semanas posteriores a la cirugía, para evitar cualquier tipo de presión en las orejas. Además, el uso de vendajes y/o una diadema puede ser necesario durante unos días para mantener las orejas en su lugar y evitar lesiones.
En general, la mayoría de los pacientes pueden volver a sus actividades diarias normales después de unos días de la cirugía. Es importante evitar cualquier actividad física intensa o deportes que puedan poner presión en las orejas durante un mínimo de cuatro semanas después de la cirugía.
Es posible que se requieran visitas de seguimiento con el cirujano para evaluar el proceso de recuperación y asegurarse de que todo esté sanando adecuadamente.
¿Qué riesgos conlleva una otoplastia?
Como cualquier procedimiento quirúrgico, la otoplastia conlleva ciertos riesgos.
Los riesgos asociados a la otoplastia incluyen:
- Infección: cualquier procedimiento quirúrgico conlleva un riesgo de infección. Esta no es una excepción. Los síntomas de una infección pueden incluir enrojecimiento, hinchazón, dolor y fiebre.
- Hemorragia: También puede causar hemorragias durante o después del procedimiento. Si experimentas un sangrado excesivo, debes contactar a tu médico de inmediato.
- Asimetría: es posible que los resultados no sean completamente simétricos. Si bien los cirujanos intentan hacer que las orejas se vean lo más simétricas posible, siempre puede haber pequeñas diferencias.
- Cicatrices: Esta cirugía, como todas, implica realizar incisiones detrás de las orejas, lo que puede dejar cicatrices. En la mayoría de los casos, estas cicatrices son muy pequeñas y se desvanecen con el tiempo.
- Cambio en la sensibilidad: Puede provocar cambios en la sensación en la piel de la oreja y en la piel cercana a la incisión. En la mayoría de los casos, estos cambios son temporales y desaparecen con el tiempo.
Es importante que hables con tu cirujano sobre los riesgos y beneficios de la otoplastia antes de decidir someterte al procedimiento.
¿Quién es el candidato perfecto para la otoplastia?
Un buen candidato para la cirugía estética de orejas, sería una persona que está en buen estado de salud general y que tiene expectativas realistas sobre los resultados del procedimiento.
En términos de la apariencia de las orejas, un buen candidato para la otoplastia tendría orejas que sobresalen demasiado de la cabeza o tienen una forma irregular que le causa incomodidad o baja autoestima. Los candidatos ideales también tendrían orejas completamente desarrolladas, lo que suele ocurrir alrededor de los 5 o 6 años de edad.
Es importante que los candidatos a la otoplastia tengan una buena salud mental y emocional, y que estén motivados para someterse al procedimiento por su propio deseo y no por la presión de los demás. Los candidatos también deberían estar dispuestos a seguir las instrucciones del cirujano antes y después de la cirugía, como evitar ciertos medicamentos y actividades que puedan interferir con la recuperación.
En general, un buen candidato para la otoplastia debería tener una discusión detallada con su cirujano plástico para asegurarse de que el procedimiento es la opción correcta para ellos y que entienden completamente los riesgos y beneficios involucrados.
¿Cuánto cuesta una otoplastia?
El coste de una cirugía de este tipo puede variar notablemente dependiendo de las circunstancias individuales de cada paciente, por eso, si crees que eres un buen candidato/a a una otoplastia te animamos a contactar con nosotros para poder ofrecerte un presupuesto adaptado a ti y tus objetivos.
